viernes, 18 de abril de 2014

"No me gusta la plata..."


"No me gusta la plata"

“Y por qué no te gusta la plata?”

“Porque me complica el contacto con la gente.”

Este dialogo escuchaba yo de fondo, en uno de esos programas largos que pasan los 
sábados a la tarde (tipo “Teleshow”…como diría una amiga) en la pantalla de televisión de una estación de servicio, donde me tomaba un café mientras leía un libro que hablaba sobre la circulación de la energía en los organismos vivos.  

El dialogo se daba entre el conductor del programa y un “ciudadano común”, y ocurría en el preciso momento en que yo empezaba a leer un párrafo de un capitulo con el título de “El metabolismo de la electricidad” que decía lo siguiente: “Desde el punto de vista de la electricidad, el organismo sano puede compararse a un lago de montaña siempre alimentado de agua fresca, que se va inmediatamente por el torrente, y el organismo debilitado y enfermo, a una marisma en la que el agua está detenida y podrida. TODO SUCEDE COMO SI LA PERDIDA DE IONES FUESE TAN IMPORTANTE COMO SU ABSORCION, como si condicionase a ésta, exactamente en la misma forma que la espiración condiciona la inspiración”.

Así es…pensé yo entonces, mientras de fondo ya habían cambiado de tema, y estaban haciendo un sorteo entre la gente que había estado llamando durante todo el día a un 0-800-quien sabe que cosa… No es el dinero el problema en sí mismo (el dinero es solo una energía). Es la acumulación (en este caso del dinero) lo que estanca la energía. Aquel que acumula obstaculiza el libre flujo de energía y se aísla del resto.
Así es que DAR es tan importante como RECIBIR. Aquel que no da no puede recibir, y aquel que no recibe, dar no puede (o si, pero se agota rápidamente).

Es la liberación de la energía vital lo que permite la circulación por su propia fuerza. Y aHí donde se “estanca” la energía (es decir, donde no es liberada, donde es acumulada), la circulación se bloquea (en estos tiempos mucho se habla sobre los “bloqueos energéticos”) y el organismo enferma. 

Y mientras de fondo había terminado el sorteo y empezaba un partido de mini futbol entre famosos, yo seguía leyendo: “Cargadas con el mismo potencial, una rata muerta se descarga muy lentamente, en tanto que una viva presenta una muy fuerte pérdida de energía, índice de una gran actividad eléctrica vital”. 

“No me gusta la plata porque me complica el contacto con la gente” decía el señor de Teleshow.

Porque aquello que no circula se estanca y se aísla, porque pierde la conexión con aquello de donde la energía proviene. Sabiduría pura puesta en simples palabras.

Algunos expresan esta sabiduría a través de palabras un poco más complicadas, escriben libros, la investigan detras de las puertas de un laboratorio, o pasan meses intentando descifrar kilométricas ecuaciones en un aula de Física en alguna universidad.

Dar…es la única forma que tenemos de que la energía circule. “Dad y recibiréis.”

Es la Ley Universal del Intercambio

El señor de Teleshow lo tenía bien clarito…

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